Hay varios tipos de asma. El asma de causa alérgica se conoce como asma extrínseco porque está ocasionado por un agente externo (alérgeno) Cuando el aire lleva alérgenos (p. ej., pólenes) se produce en los pacientes sensibles una reacción alérgica a nivel de la mucosa bronquial. Esta reacción provoca una contracción de los músculos que rodean los bronquios (broncoconstricción) y una reacción inflamatoria que reduce la luz bronquial, con la consiguiente dificultad respiratoria. Cuando desaparece la reacción, el paciente vuelve a respirar sin fatiga.
Como en el caso de la rinitis alérgica, el asma puede aparecer solo en algún periodo determinado del año coincidiendo con la presencia del alérgeno en el aire. Es el llamado asma estacional (p. ej., asma polínico). En otras ocasiones el alérgeno está presente de forma más o menos continua a lo largo de todo el año, provocando un asma denominado perenne (p. ej., asma a ácaros). Otras veces el asma se asocia a alérgenos presentes en determinados lugares o centro de trabajo (asma ocupacional)
Es importante esclarecer el tipo de asma que tiene el enfermo y, en su caso, el alérgeno responsable para poder establecer un tratamiento específico (inmunoterpaia y/o medidas de evitación). En el asma polínico el tratamiento sintomático se realizará sólo durante la época de polinización.
Los alérgenos responsables del asma alérgico son los inhalantes ambientales.